El sol prolongado puede causar daño a las mascotas

La exposición prolongada de las mascotas al sol puede producirle un golpe de calor, además de causar serios problemas como la dermatitis solar o actínica o el cáncer. También podría modificar su pigmentación de la piel causando manchas oscuras que debilitan su protección ante los rayos solares.

Hay que tener en cuenta que los síntomas de la dermatitis pueden pasar desapercibidos en algunos casos, por ello debemos estar atentos a nuestra mascota. Es importante que sepas que el sol reseca la piel, puede presentarse descamación y enrojecimiento, la perdida de pelo es más de lo habitual, se presentan ulceras, sobre todo en la zona de la nariz, orejas y parpados. Tu mascota puede presentar heridas causadas por rascarse debido a la sudoración o al calor.

La frecuente exposición al sol puede producir carcinomas, lo que puede ser mortal.

Los perros tienen de forma natural una micro pigmentación, con un alto nivel de melanina, que protege la piel de los efectos del sol, pero eso no descarta que el sol prolongado cause daños a su salud.

Pero existen también muchos perros y gatos con poco o sin pelaje o sin pigmentación, siendo más vulnerables a la exposición solar, teniendo que recurrir a medidas de cuidado extremas.

Cuando el sol está muy fuerte, las mascotas pueden presentar quemaduras severas en sus patas o en aquellas zonas sensibles.

Tampoco es saludable que encierres a tu mascota para evitar el sol, ya que este es la principal fuente de vitamina D, fortalece los huesos y tiene muchos beneficios, lo que debes es evitar la larga exposición o sacarlo a pasear cuando el sol no sea demasiado fuerte. También puedes aplicar protector solar a tu mascota en aquellas zonas donde no tiene pigmentación o pelaje; pide consejo del veterinario sobre cuáles son las mejores opciones.

La realidad es que la dosis adecuada el sol fortalece el sistema inmune y favorece la regeneración de la piel muerta, cicatrices, ayuda con la tonificación muscular, controlar la tensión, entre otros.

Esther R.

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